Se recuerda el caso de una mujer llamada Paige Ferguson cayó de la cama, y a pesar de que tenía algunas reservas sobre publicar los detalles del accidente en redes sociales, se animó a hacerlo para evitar que otros padres cometan el mismo error que ella.
Explicó que después de acostar a su hijo para que tomara una siesta en medio de la cama rodeada de almohadas, sucedió lo peor: el bebé se cayó.
"Necesito que las personas se den cuenta de la gravedad de una lesión en la cabeza", apuntó.
Agregó que todo empezó "cuando cayó de una cama que estaba a solo dos pies (60 centímetros) del suelo. Tenía un chichón en la cabeza. Un golpe. Estaba llorando, actuando alerta, y en un momento incluso sonrió. Como somos padres paranoicos, decidimos que lo evaluaran. Pensamos con certeza que iban a decir que se golpeó la cabeza, sufrió un chichón y que estaría bien".
Pero desafortunadamente para Paige y su prometido Blake Linton, ese no era el caso, ya que cuando llegaron al hospital, Colton comenzó a vomitar, y los médicos inmediatamente le hicieron una tomografía computarizada.
Y tras obtener los resultados, el bebè fue trasladado en helicóptero a otro hospital para recibir tratamiento. Cuando Blake y Paige cruzaron las puertas, ya había 20 médicos trabajando en su hijo pequeño.
Eventualmente, Paige y Blake recibieron la noticia de que Colton tenía una fractura de cráneo. Ella dijo que hasta el día de hoy, todavía no puede creer la magnitud de las lesiones de Colton.
"Estaba conmocionada por decir lo menos. Estaba completamente incrédula. No podía entenderlo. Todavía, ninguno de nosotros puede. Mi corazón estaba destrozado. Todavía estoy tratando de volver a juntar las piezas".
Y teniendo en cuenta la gravedad del trauma en su cabeza, Colton se enfrentó a un largo e incierto camino hacia la recuperación.
"Se fracturó el cráneo y sangró la mitad de volumen de sangre en su cerebro", dijo Paige, y agregó que el sangrado hizo que su hijo sufriera un paro cardíaco. "Voy a ser franco aquí: Colton puede no vivir. Colton puede vivir y nunca caminar o hablar, Colton puede estar bien, Colton puede estar ‘retrasado’. Está en el aire ahora y todavía está luchando por su vida porque no estamos fuera de peligro".
Ahora, se ha convertido en la misión de Paige evitar que les ocurra la misma lesión a otros niños. Ella está instando a otros padres a tomarse en serio el traumatismo craneal y les ruega que dejen de creer en los cuentos viejos sobre los golpes en la cabeza.
"Esto es una pesadilla. No quiero que otros padres pasen por esto. No quiero que ningún niño pase por esto. Por favor, toma en serio cualquier golpe en la cabeza. No puedo decir lo suficiente. Mi corazón está roto; "dijo.
Explicó que "el niño está acostado frente a nosotros y lo extrañamos terriblemente", dijo.
Aunque Colton está oficialmente fuera del hospital, los médicos no están seguros de cuánto daño causó su caída. Paige y Blake están aliviados de que su bebé haya comenzado a sonreír nuevamente a pesar de enfrentar reveses médicos.
“Lo llevamos a casa un mes después de su accidente. Fue increíble llevarlo a casa después de que los médicos me dijeron repetidamente que iba a morir, pero fue muy aterrador. Debido a que su cerebro perdió oxígeno durante su paro cardíaco debido a la hemorragia masiva del cerebro, sufre de parálisis cerebral y atrofia cerebral.
Él también sufre de epilepsia severa. Vemos muchos especialistas y terapeutas. Seguiremos haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar que tenga la mejor vida posible.”
Fuente:actitudfem. com
